El haber nacido en Honduras pero tener padres colombianos me ha dado la oportunidad de ver lo mejor de ambas culturas y creo que no es un secreto que a nosotros los hondureños (en general) nos falta mucho amor patrio y no solo hablo de la emoción de ponerse la camiseta cuando juega la selección; ser patriota es sentirse orgulloso y honrar nuestra tierra, y esto se puede hacer de varias formas.
Debemos cuidar lo que tenemos, no puedo expresar cuanto me molesta ver a alguien tirando basura en la calle; si quieren dejemos a un lado lo dañino para el medio ambiente, también estamos ensuciando nuestra ciudad y contribuimos a problemas mas grandes como cañerías obstruidas por basura que luego termina en inundaciones.
Trabajemos por nuestra tierra, al trabajar estamos aportando al país, pero mas que solo trabajar, debemos educar bien a nuestros hijos pues tengamos la conciencia que estamos formando gente para el futuro de nuestro país. Enseñarles la importancia del respeto ajeno, del trabajo, de la hospitalidad y sobre todo el amor por nuestra tierra.
Cuidar como hablamos de ella es algo muy importante, hablar bien de ella es promoverla para que todo el mundo vea sus riquezas. La prensa amarillista lo que crea es que los turistas se alejen, y nosotros mismos no ayudamos en las redes sociales.
Y algo que puedo sacar de mi segunda tierra Colombia es lo importante que es apoyar lo nuestro. Utilizar el producto que se produce en casa es generar dinero que se queda en el país, además ayudamos a generar empleo para nuestros hermanos hondureños en vez de generar empleo en el exterior.
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